domingo, 18 de agosto de 2013

Los Padres de La Iglesia

Se llama Padres de la Iglesia a un grupo de pastores y escritores eclesiásticos autodidactas, obispos en su mayoría, de los primeros siglos del cristianismo, cuyo conjunto doctrinal es considerado fundamento de la fe y de la ortodoxia en la Iglesia Católica. Los "Padres de la Iglesia" son los mas insignes pastores, generalmente obispos (no siempre), de la Iglesia de los primeros siglos. Sus enseñanzas, en sentido colectivo, son consideradas por la Iglesia como fundamento indispensable de la doctrina ortodoxa cristiana. Por su cercanía a los Apóstoles nos presentan la correcta interpretación de las Sagradas Escrituras. Los cuatro principales criterios para ser reconocido como "Padre de la Iglesia": antigüedad, ortodoxia, santidad, aprobación de la Iglesia.

Por qué conocer a los Padres


 
1) Los Padres son testigos privilegiados de la Tradición de la Iglesia.

2) Los Padres nos han transmitido un método teológico que es a la vez luminoso y seguro.

3) Los escritos de los Padres ofrecen una riqueza cultural y apostólica, que hace de ellos los grandes maestros de la Iglesia de ayer, de hoy y de siempre. El análisis de estas afimnaciones puede servirnos para ilustrar cómo los escritos de estos autores constituyen un verdadero tesoro de la Iglesia; un tesoro cuyo conocimiento y disfrute no debería quedar reservado a unos pocos, ya que es patrimonio de todos los cristianos. 

 Los Santos Padres nos transmiten, con sus comentarios y escritos, la doctrina viva que predicó Jesucristo, transmitida sin interrupción por los Apóstoles a sus sucesores, los obispos. Por su cercanía a aquel tiempo, el testimonio de los Padres goza de especial valor.

Habitualmente se considera que su época abarca los siete primeros siglos de la Era Cristiana. Naturalmente, cuanto más antiguo sea un Padre, más autorizado será su testimonio, siempre que su doctrina resulte concorde con lo que Jesucristo reveló a la Iglesia, y su conducta haya estado en sintonía con esas enseñanzas. 

 A menudo los Padres de la Iglesia tuvieron que dar respuesta a cuestiones y dificultades morales y teológicas en medio de un ambiente convulsionado por persecuciones externas y conflictos internos producidos por herejías y cismas de la Iglesia post apostólica. Por eso fueron los continuadores inmediatos de la obra que los apóstoles habían iniciado, y a los que con ella pasaron a sustituir ventajosamente, pues dejaron un amplio testimonio de sus trabajos y enseñanzas, escritos generalmente en latín, y respaldados muchas veces directamente por la jerarquía eclesiástica encabezada por el papa.

 El título de «Padres» para este grupo aparece desde el siglo IV, tal como puede observarse en las palabras de san Basilio: «Lo que nosotros enseñamos no es el resultado de nuestras reflexiones personales, sino lo que hemos aprendido de los Padres. El papa Gelasio I confeccionó una primera lista oficial de los Padres de la Iglesia. Al estudio y análisis de la obra de estos importantísimos escritores de los primeros tiempos de la Iglesia se le llama Patrística. Al estudio de la vida y persona de los Padres se le llama Patrología. Estas dos ciencias han establecido una clasificación por generaciones y procedencias culturales con objeto de facilitar una comprensión más exacta del desarrollo de la teología cristiana.

 Los Grandes Padres de la Iglesia


Los cuatro grandes Padres de la Iglesia Griega son:
Y los cuatro grandes Padres de la Iglesia Latina son:
Los Padres de La Iglesia se clasifican en cuatros grupos: Padres Apostolicos, Padres Pre-Concilio de Nicea,  Padres Post-Concilio de Nicea y los Apologistas.

Se llaman padres apostólicos a los autores del cristianismo primitivo que, tuvieron algún contacto con uno o más de los apóstoles de Jesús de Nazaret. Se trata de escritores de los siglos I y II. Entre estos escritores se cuenta a Clemente de Roma, san Ignacio de Antioquía, Papías de Hierápolis, san Policarpo de Esmirna, Bernabe y, entre los escritos sin autor conocido, la Didaché, la Carta a Diogneto y el Pastor de Hermas.

Se llaman Padres Pre-Concilio de Nicea, a los sucesores de los Padres Apostolicos, estos se ubican desde el siglo II hasta el Primer Concilio Ecumenico de Nicea. Entre los principales de ellos podemos citar: San Ireneo de Lyon, dicipulo de Policarpo de Esmirna, San Justino Martir, San Cipriano de Cartagos, San Hipolito de Roma, San Teofilo de Antoquia, Origenes y Tertuliano (estos son escritores esclesiasticos), San Atenagoras de Atenas, San Clemente de Alejanrdia, San Meliton de Sardes y otros mas.

Se llaman Padres Post-Concilio de Nicea, a los sucesores de los Padres Pre-Nicenos. Estos se ubican desde el Primer Concilio de Nicea celebrado en el año 325, hasta el siglo VII, a partir de aqui, vendran los sucesores de los Padres de la Iglesia, los cuales se llaman Doctores de la Iglesia. Entre los Padres Post-Nicenos podemos citar: A los cuatros grandes Padres de la Iglesia Griega y Latina, mencionados anteriormente, San Eusebio de Cesarea, quien es el padre de la historia de la Iglesia, San Cirilo de Alejandria, San Juan Damaceno, San Leon Magno, San Osio de Cordoba

Vamos a empezar con los mas antiguos; los Padres Apostolicos:

San Clemente de Roma: Cuarto Papa  de la Iglesia Catolica (Tercer sucesor de San Pedro como obispo de Roma y vicario de Cristo). Dicipulo de Pedro y Pablo. Ordenado Obispo por San Pedro, escribió una importante carta a los corintios, carta que tenía por objeto restablecer entre ellos la paz y la concordia. Elegido en el año 88, murió en 97. Exiliado por el emperador Trajano al Ponto, fue arrojado al mar con un áncora al cuello. En su obra Contra las Herejías, San Ireneo expuso una lista de los obispos romanos, situando a Clemente Romano como el tercer sucesor de los apóstoles Pedro y Pablo. Eusebio menciona también a Clemente de Roma como tercer sucesor de San Pedro, y encuadra su obispado entre los años 92 al 102. Tertuliano nos dice que fue consagrado obispo por el mismo apóstol Pedro; Epifanio nos cuenta que renunció al primado en favor de Lino y Anacleto, primer y segundo sucesor de Pedro, pero que a la muerte de estos recuperó el cargo. Clemente conocio a San Pablo, el apóstol de los gentiles, y fue el destinatario del elogio del Apóstol por la colaboración prestada a los filipenses (Filipenses 4:3). De hecho, Ireneo de Lyon indicó que «Clemente había visto personalmente a los apóstoles y escuchaba con sus propios oídos la predicación de ellos». Durante su pontificado, en el año 95, surgieron levantamientos contra los presbíteros-epíscopos en Corinto. Clemente, como obispo de la Iglesia de Roma, envió a los corintios una carta llamándolos al orden y a la obediencia a sus respectivos pastores evocando conmovedoramente el recuerdo de los apóstoles Pedro y Pablo y comparando la disciplina eclesiástica con la de la legión romana.

El único escrito que se conserva de San Clemente Romano es la Epístola a los Corintios. Es la primera obra de la literatura cristiana, fuera del Nuevo Testamento de la que consta históricamente el nombre de su autor, la situación y la época en que se escribió.
Según la epístola, dirigida a la comunidad de Corinto, el autor parece provenir de ambientes culturales judeo-helenísticos y es un experto en el Antiguo Testamento como también en literatura y filosofía paganas.
Durante el reinado del emperador Domiciano surgieron disputas en el seno de la Iglesia de Corinto que obligaron al autor a tomar parte. Las facciones que San Pablo condenara tan severamente estaban de nuevo irritadas. El problema era claro: algunos miembros de la comunidad se habían sublevado contra la autoridad eclesiástica, deponiendo de sus cargos a los eclesiásticos legítimos de dichos cargos jerárquicos. Solamente una mínima parte de la que integraba la comunidad permanecía fiel a los presbíteros que habían sido depuestos. La intención de  San Clemente Romano era la de unificar las diferencias que habían surgido y reparar el escándalo que con ello se estaba dando a los paganos. La Iglesia católica en su liturgia romana conmemora el martirio de Clemente el día 23 de noviembre y ha inscrito su nombre en el Canon romano de la Eucaristía, en el memento de los santos.... Si quieres leer la Carta a los Corintios de San Clemente de Roma, puede entrar aqui Carta a Iglesia de Corintio de San Clemente de Roma En esta Carta San Clemente menciona el martirio de los Apostoles Pedro y Pablo en Roma, asi como tambien hace enfasi en la Sucesion Apostolica.

San Ignacio de Antoquia: Nacio en el año 35 y murio en el 117. Fue dicipulo y ordenado Obispo por el Apostol Pedro. Fue el segundo Obispo de la Iglesia de Antoquia. Es autor de siete cartas que redactó en el transcurso de unas pocas semanas, mientras era conducido desde Siria a Roma para ser ejecutado o, como él mismo escribió: «...para ser trigo de Dios, molido por los dientes de las fieras y convertido en pan puro de Cristo». Ignacio es un mártir del cristianismo y uno de los santos de la Iglesia Católica y de la Iglesia Ortodoxa, que celebran su festividad el 17 de octubre  y el 20 de diciembre, respectivamente. Ignacio escribió cartas a las comunidades cristianas de Éfeso, Magnesia del Meandro, Trales, Roma, Filadelfia y Esmirna, además de una carta personal al obispo Policarpo de Esmirna, otro «Padre de la Iglesia» y también «Padre Apostólico». Los escritos de Ignacio están próximos en el tiempo a la redacción de los evangelios y una parte de la investigación ignaciana está centrada en esclarecer su relación con ellos. Las cartas ofrecen, además, valiosos indicios sobre la situación de las comunidades cristianas a finales del siglo I y comienzos del siglo II. Se desconoce todo sobre su familia y las circunstancias en las cuales conoció el cristianismo. Se ignora también cuál fue su trayectoria dentro de la Iglesia. Una leyenda del siglo X le supone discípulo de Jesucristo en la persona del niño que aparece como protagonista en el pasaje bíblico de Mateo 18. «Él llamó a un niño, lo puso en medio de ellos y dijo: Os aseguro que si no os hacéis como niños, no entraréis en el Reino de los Cielos». Ignacio era obispo de Antioquía cuando fue condenado a muerte en tiempos de Trajano acusado, es de suponer, de profesar el cristianismo. En sus cartas, Ignacio se describe a sí mismo utilizando el término griego «katakritos» (condenado a muerte), lo que no aclara las circunstancias de su detención. En otros lugares afirma llevar cadenas «por causa del Nombre» (Ad Eph. 1, 2), refiriéndose a Jesucristo. Aunque fue condenado en Siria y pudo ser ejecutado allí, se ordenó su traslado a Roma. Fue durante su traslado desde Siria a Roma que redacto las siete cartas. En sus cartas San Ignacio de Antoquia hace mencion de la presencia real de Cristo en la Eucaristia, del la Virginidad Perpetua de Maria, la Sucesion Apostolica, la jeralquia de la Iglesia, ataca mucho a los herejes de su epoca y es el primero en llamar a la Iglesia Cristiana, como Iglesia Catolica . Si quieres leer las cartas de Ignacio puedes hacerlo entrando aqui Espistola a los Efesios Epistola a los Magnesios Epistola a los Trallianos El mas importante de sus escritos este Epistola a los Romanos  

San Policarpo de Esmirna: Nacio en el año 70 y murio en el 150. Fue conocedor en vida del Apostol Juan y ordenado Obsipo por el mismo. Yo puedo mostrar el sitio en el que el bienaventurado Policarpo acostumbraba a sentarse a predicar. Todavía recuerdo la gravedad de su porte, la santidad de su persona, la majestad de su rostro y de sus movimientos, así como sus santas exhortaciones al pueblo. Todavía me parece oírle contar cómo había conversado con Juan y con muchos otros que vieron a Jesucristo, y repetir las palabras que había oído de ellos”. Son palabras de San Ireneo , ilustre discípulo de San Policarpo y futuro obispo de Lyon. Se conservan 2 escritos sobre San Policarpo, uno es la Carta a los Filipenses que el mismo escribio, y el otro es el acta de su martirio, en su carta a los Filipense ataca a la herejia de los Docetas. Si quieres leer los escritos sobre el, puedes hacerlo entrando aqui Carta a los Filipenses.

La Didache o Doctrina de los 12 Apostoles: Es es el escrito cristiano mas primitivo que existe, se escribio antes de los evangelios a mitad del siglo I. Se desconoce su autor. La didache contiene enseñanza sobre la liturgia, el Bautsimo, La Eucaristia, el domingo como dia de adoracion a Dios, la Oracion y el ayuno, el Padrenuestro, una seccion moral y hace enfasi en la Sucesion Apostolica. Si quieres leer la Didache, puedes hacerlo entrando aqui Doctrina de los 12 Apostoles 

San Bernabe: Se desconoce la fecha de su nacimiento, fallecio en el año 61. Fue un judío que pertenecía a la tribu de Leví, vivió durante el siglo I. Su nombre original era José. Los apóstoles lo cambiaron por el de Bernabé, que significa Hijo de la Exhortación, aunque según San Lucas significa el esforzado, el que anima y entusiasma.
Los Hechos de los Apóstoles afirman, en el capítulo 4 versículos 34 a 37, que Bernabé vendió su finca y el producto que de ella obtuvo lo entregó a los apóstoles para distribuir entre los pobres.
Fue un gran colaborador de San Pablo quien a su regreso a Jerusalén, tres años después de su conversión, recibió de Bernabé apoyo ante los demás apóstoles, e intercesión para obtener la aceptación del resto de los apóstoles de Jerusalén a su ministerio.
No se encuentra entre los doce elegidos por Jesucristo, pero probablemente fue uno de los setenta discípulos mencionados en el Evangelio. Bernabé es considerado apóstol por los primeros Padres de la Iglesia y también por San Lucas por la misión especial que le confió el Espíritu Santo.
Los Apóstoles lo apreciaban mucho por ser "un buen hombre, lleno de fe y del Espíritu Santo" (Hechos 11,24), por eso lo eligieron para la evangelización de Antioquía. Con sus prédicas aumentaron los convertidos. Se conserva un escrito sobre este Santo llamado La Epistola de Bernabe, se divide en dos secciones, la primera es teórica y trata de la interpretación de la Ley y el Antiguo Testamento y de cuestiones dogmáticas. El autor polemiza contra la interpretación literal del Antiguo Testamento y considera que debe interpretarse en forma alegórica. Considera que el judaísmo se equivocó al interpretar literalmente la Ley. Por ejemplo, dice que Dios no quiere sacrificios, sino la ofrenda de un corazón arrepentido; no le interesa que nos abstengamos de la carne de animales impuros, sino que renunciemos a los pecados simbolizados por aquellos animales (9-10): hay hombres que se parecen a los cerdos, que olvidan la mano que los alimenta; el águila, el halcón, el gavilán y el cuervo son animales simbolizan hombres que logran su pan cotidiano por la rapiña y toda suerte de iniquidad, en vez de ganarse su sustento con un trabajo honrado y el sudor de su frente (14:4). Cuando el Génesis dice que el mundo fue creado en seis días, hay que tener en cuenta que para Dios un día son como mil años y "el Hijo de Dios vendrá de nuevo a juzgar a los impíos y a cambiar el sol y la luna y las estrellas, y el día séptimo descansará; entonces amanecerá el sábado del reino milenario (15:1-9)
Expone la doctrina de la preexistencia del Hijo de Dios, que se encarnó en Jesucristo y la importancia del Bautismo como símbolo de que quien lo recibe es adoptado como hijo de Dios y transformado en templo del Espíritu Santo.
La segunda sección, denominada los Dos Caminos, es práctica, pues se refiere a la vida cristina, la ética y la moral. Así como la Didaché, expone que el ser humano puede seguir un camino de luz y vida que se propone señalar o un camino de tinieblas y muerte que propone evitar... Si gusta leer la Epistola de Bernabe puedes hacerlo entrando aqui Epistola de Bernabe

La Epistola a Diogneto: Es una obra de apologetica cristiana, escrita a principio del siglo II.  Esta pequeña obra, de apenas doce capítulos, es una pieza singular de la literatura cristiana.Es singular por su catalogación, por su origen incierto, por su chocante descubrimiento, por la fatídica destrucció del único códice que la contenía. Es singular también por su autoría, por los enigmas que plantea, por la originalidad de las teorías de que es objeto. Sobre todo es singular por su belleza y elegancia, que discurre lejos de la crudeza de Taciano, la franqueza  de Justino, los escarnios de Hermias,  la simplicidad de Arístides, el fideísmo de Teófilo o las filosóficas legaciones de Atenágoras. Por su estilo, aunque no tanto por su contenido, A Diogneto se eleva muy por encima de otros escritos de la apologética cristiana... Si quieres leer la Epistola a Diogneto, puedes leerla aqui Epistola a Diogneto

San Ireneo de Lyon: Nacio en Esmirna en el año 130 y murio en Lyon en 202. Fue obispo de la ciudad de Lyon desde 189. Considerado como el más importante adversario del gnosticismo del siglo II. Su obra principal es Contra las Herejías. Ireneo fue uno de los discípulos —considerado el mejor de todos— del obispo de Esmirna, Policarpo, discípulo, a su vez, del Apóstol Juan. Policarpo lo envió a las Galias (157). En Lugdunum (actual Lyon), capital de la Galia Lugdunense, donde se registró una cruel persecución que causó numerosos mártires entre los cristianos, fue ordenado sacerdote y desde el año 177 ejerció allí como presbítero. Fue enviado al Obispo de Roma, el Papa Eleuterio, para rogarle mediante «la más piadosa y ortodoxa de las cartas», en nombre de la unidad y de la paz de la Iglesia, para que tratase con suavidad a los hermanos montanistas de Frigia.
Explicó que al rechazar a los falsos profetas había que acoger el verdadero don de profecía. Pese a rechazar los «excesos carismáticos» y apocalípticos del montanismo, consideró que no se podía prohibir las manifestaciones del Espíritu Santo dentro de las iglesias romanas.
Sucedió a Potino en la sede episcopal de Lyon desde el 189 e intervino ante el obispo romano, el Papa Víctor (190), para que no separara de la comunión a los cristianos orientales que celebraban la Pascua el mismo día que los judíos. No se tiene certeza sobre la fecha de su muerte, pero se estima ocurrió entre el año 202 y el 207. El nombre de San Ireneo está vinculado, sobre todo, a la polémica contra los gnósticos. Escribió el tratado Contra las Herejías en cinco tomos «En latín: Adversus haereses, AH»), cuyo título completo es Desenmascarar y Refutar la falsamente llamada Ciencia (Gnosis en griego, idioma en el que fue escrito). En su mariología desarrolla mucho el paralelismo entre Eva y María de San Justino. María reparó la desobediencia de Eva, por tanto contraría a las corrientes agnósticas que inquirian que Jesús no era Dios y Hombre; pues debía tener la Naturaleza Humana para poder redimirla, pero la Santidad de Dios para poder presentarse sin Mancha.
Ireneo garantiza contra los gnósticos la realidad de la carne de Jesús, sin la cual es imposible la vida histórica de Cristo, y su muerte y resurrección reales:
«Yerran quienes afirman que él nada recibió de la Virgen... De otro modo habría sido inútil su descenso a María: ¿para qué descendía a ella, si nada había de tomar de ella?»
San Ireneo de Lyon (AH III, 22,1-2).
Dice que el Hijo, al hacerse carne, al nacer «realmente» de María, es la prenda de que él es descendiente de Adán, cuya simiente había de asumir para poder transformarla en lo que él es como Dios. Por eso su carne es la misma carne de María, hija de Adán (cf. AH III, 21,10, V, 1,2).3 Por medio de ella Jesús se liga también a la generación de Abraham y de David, y solo por tal motivo el Hijo de María puede llegar a ser el cumplimiento de las promesas hechas a los Padres (cf. AH III, 16,2-3; D 35-36, 40, 59). San Ireneo dice que Maria es la nueva Eva, que la gracia que Eva nos arrebato nos fue devuelta en Maria la hija de Sion. Eva con su desobediencia a Dios trajo la muerte, Maria con su obediencia a Dios trajo la vida y la salvacion al mundo, que es Jesucristo... Si quieres leer las Obras de San Ireneo de Lyon, aqui te las dejo Contra Los Herejes Demostracion de la Predicacion Apostolica En esta ultima San Ireneo hace una lista de la sucesion apostolica de la Iglesia de Roma, tambien afirma que la Iglesia de Roma fue fundada por San Pedro y San Pablo, que Pedro fue su primer obispo y que antes de morir nombro a Lino como sucesor.

San Justino Martir: Fue uno de los primeros apologistas cristiano, nacio en el año 100 y murio en el 168. Justino es uno de los mártires que demuestra, desde el punto de vista histórico, de cómo la Iglesia celebraba el culto desde el comienzo de la misma. En el capítulo 2, versículo 42 del libro Hechos de los Apóstoles, se lee "Perseveraban asiduamente en la doctrina de los Apóstoles y la comunión, en la fracción del pan y en las oraciones". De allí que su famoso discurso eucarístico sea citado siempre como referencia de cómo vivían la fe los primeros cristianos.

Su discurso Eucarístico

El día que se llama día del sol tiene lugar la reunión en un mismo sitio de todos los que habitan en la ciudad o en el campo. Se leen las memorias de los Apóstoles y los escritos de los Profetas. Cuando el lector ha terminado, el que preside toma la palabra para incitar y exhortar a la imitación de tan bellas cosas. Luego nos levantamos y oramos por nosotros… y por todos los demás dondequiera que estén, a fin de que seamos hallados justos en nuestra vida y nuestras acciones y seamos fieles a los mandamientos para alcanzar la salvación eterna.
"Luego se lleva al que preside el pan y una copa con vino y agua mezclados. El que preside los toma y eleva alabanzas y gloria al Padre del universo, por el nombre del Hijo y del Espíritu Santo, y da gracias largamente porque hayamos sido juzgados dignos de estos dones.
"Cuando el que preside ha hecho la acción de gracias y el pueblo ha respondido “amén”, los que entre nosotros se llaman diáconos distribuyen a todos los que están presentes el pan y el vino “eucaristizados”. (SAN JUSTINO, Carta a Antonino Pío, Emperador, año 155) “A nadie le es lícito participar en la Eucaristía, si no cree que son verdad las cosas que enseñamos y no se ha purificado en aquel baño que da la remisión de los pecados y la regeneración, y no vive como Cristo nos enseñó. Porque no tomamos estos alimentos como si fueran un pan común o una bebida ordinaria, sino que así como Cristo, nuestro salvador, se hizo carne y sangre a causa de nuestra salvación, de la misma manera hemos aprendido que el alimento sobre el que fue recitada la acción de gracias, que contiene las palabras de Jesús y con que se alimenta y transforma nuestra sangre y nuestra carne, es precisamente la carne y la sangre de aquel mismo Jesús que se encarnó.
"Los apóstoles, en efecto, en sus tratados llamados Evangelios, nos cuentan que así les fue mandado, cuando Jesús, tomando pan y dando gracias dijo: “Haced esto en conmemoración mía. Esto es mi cuerpo”. Y luego, tomando del mismo modo en sus manos el cáliz, dio gracias y dijo: “Esta es mi sangre”, dándoselo a ellos solos. Desde entonces seguimos recordándonos unos a otros estas cosas. Y los que tenemos bienes acudimos en ayuda de otros que no los tienen y permanecemos unidos. Y siempre que presentamos nuestras ofrendas alabamos al Creador de todo por medio de su Hijo Jesucristo y del Espíritu Santo”. (SAN JUSTINO, Carta a Antonino Pío, Emperador, año 155)... Si deseas leer toda la obra completa de San Justino Martir puede descargar el documento aqui Apologia de Justino Martir

Origenes: la vida de ORÍGENES tenemos gran abundancia de datos, debido especialmente, aunque no en exclusiva, al espacio que en su Historia eclesiástica le dedica Eusebio de Cesarea, quien pudo consultar un centenar de cartas suyas. Orígenes, egipcio, probablemente alejandrino, era el hijo mayor de una familia ya cristiana y numerosa; nació hacia el año 185. Su padre, que se había cuidado de que recibiera una buena educación tanto en las ciencias sagradas como en las profanas, murió mártir en el año 202. La principal actividad literaria de Orígenes estuvo dedicada al estudio de la Biblia. Su obra más ambiciosa en la que nunca dejó de trabajar, estaba dirigida a establecer un texto crítico del Antiguo Testamento, sobre la versión de los Setenta. En su apologetica expone la doctrina de la Santisima Trinidad y la virginidad perpetua de Maria, ya que los herejes de la epoca decian que Maria habia tenido otros hijos aparte de Jesus. Es considerado un Padre de la Iglesia, destacado por su erudición y, junto con San Agustín y Santo Tomás uno de los tres pilares de la teología cristiana.... Para leer los escritos de Origenes puedes leerlos aqui Textos de Origenes

Tertuliano: Abogado de profesion, nacio en el 150 y vivio hasta el 225. El primer Padre que escribe en latín. El primero en utilizar la palabra "Trinidad" para referirse a las tres personas en Dios. Nació en Cartago, Africa C.150. En sus últimos años entró en la secta montanista, apartándose de la ortodoxia. Tertuliano escribe en el año 200 su libro Apologeticum dirigido al Senado romano. Es el autor de la celebre frase: La sangre de los martires, es semilla de los cristianos.. Para apreder mas sobre Tertuliano puedes entrar aqui Sobre Tertuliano-

San Atanasio de Alejandria: Fue el pricipal opositor a la gran herejia del arrianismo en el Primer Concilio Ecumenico de Nicea. Fue obispo de Alejandría, nacido alrededor del año 296 y fallecido el 2 de mayo del año 373. Se considera santo en la Iglesia Copta, en la Iglesia Católica, en la Iglesia Ortodoxa y en la Iglesia Anglicana, además de doctor de la Iglesia Católica y padre de la Iglesia Oriental. Nació en el ambiente cosmopolita de Alejandría, donde recibió su formación filosófica y teológica. No se sabe nada de los primeros treinta años de su vida salvo que en el año 320, con veinticuatro años, fue ordenado diácono. Este cargo le permitió acompañar a su obispo, (Alejandro de Alejandría), al concilio de Nicea I en 325. Desde esa fecha se convirtió en defensor a ultranza del símbolo niceano, y enemigo acérrimo de los arrianos. En el año 328, contando con treinta y cinco años, fue elegido obispo de Alejandría, siendo el vigésimo Patriarca de Alejandría título que precede al de papa de la Iglesia Copta o Patriarca de la Iglesia Ortodoxa previo al cisma del año 451 (tras el desacuerdo del Concilio de Calcedonia). Tiene obras exegéticas con el tema de la virginidad. En la teología defiende el cristianismo tradicional frente a Arrio. Existe una Trinidad santa y completa: Padre, Hijo y Espíritu Santo; es homogénea, las tres personas tienen el mismo rango. La labor de Atanasio tanto en el I Concilio de Nicea como en toda su lucha contra el arrianismo fue de gran importancia con repercusiones que incluso llegan a la actualidad. 

San Basilo el Grande: fue obispo de Cesarea, y preeminente clérigo del siglo IV. Basilio nació alrededor del año 330 en Cesarea, Capadocia. Provenía de una familia acomodada y piadosa en la que hubo varios santos, entre ellos están su padre, también llamado Basilio, su madre Emelia, su abuela Macrina la Mayor, hermana Macrina la Joven y hermanos Gregorio de Nisa y Pedro de Cesarea, que llegó a ser obispo de Sebaste. Algunos historiadores de la Iglesia han sugerido que Teosebia –que también es santa para la Iglesia Ortodoxa Oriental– fue su hermana menor. Los principales escritos teológicos de Basilio son su De Spiritu Sancto, una lúcida y edificante reflexión sobre la Escritura y la tradición cristiana primitiva (para probar la dignidad del Espíritu Santo) y su Refutación de la apología del impío Eunomio, escrito en 363 ó 364, tres libros contra Eunomio de Cícico, el máximo exponente del arrianismo anomeo. Los tres primeros libros de la Refutación son obra suya, los libros cuarto y quinto, que suelen también incluirse, no pertenecen a Basilio o a Apolinaris de Laodicea, sino probablemente a Dídimo de Alejandría... Para leer algunos texto de San Basilio puedes entrar aqui Textos de San Basilio.

San Gregorio Nacianceno: Participante Activo del Segundo Concilio Ecumenico celebrado en Constantinopla. Las contribuciones teológicas más significativas de Gregorio surgen de su defensa de la doctrina nicena de la Trinidad. Destaca especialmente por sus contribuciones en el campo de la pneumatología, esto es, la teología referente a la naturaleza del Espíritu Santo. N ace hacia el año 329 en el pueblecito de Ariance, junto a Nacianzo, pequeña villa al sudeste de Capadocia, y ya de niño es consagrado a Dios por su piadosa madre Nonna. Su sermon mas famoso es Santa y piadosa es la idea de rezar por los muertos. Defendio la doctrina de la Santisima Trinidad en el Concilio de Constantinopla, diciendo que Espiritu Santo tambien es Dios y condeno definitivamente la herejia del arrianismo.
Está ampliamente considerado como el más completo estilista retórico de la patrística.Como orador y filósofo formado en la tradición clásica, introdujo elementos helenísticos en la iglesia primitiva, estableciendo el paradigma de los teólogos y eclesiásticos bizantinos.

San Jeronimo de Estridon: tradujo la Biblia del griego y el hebreo al latín. Nació en Estridón (Dalmacia) hacia el año 340; estudió en Roma y allí fue bautizado. Abrazó la vida ascética, marchó al Oriente y fue ordenado presbítero. Volvió a Roma y fue secretario del papa Dámaso. Fue en esta época cuando empezó su traducción latina de la Biblia. También promovió la vida monástica. Más tarde, se estableció en Belén, donde trabajó mucho por el bien de la Iglesia. Escribió gran cantidad de obras, principalmente comentarios de la sagrada Escritura. Murió en Belén el año 420. Durante su estancia en Roma, San Jerónimo escribió el año 383, el «De perpetua virginitate beatae Mariae», contra Helvidio, seglar romano, que sostenía que la Virgen María había tenido otros hijos de su esposo San José, después del nacimiento de Jesús, apoyándose en algunos textos mal interpretados de Mateo y de Lucas y en el testimonio de algunos escritores eclesiásticos, y trataba de equiparar el matrimonio a la virginidad. San Jerónimo aparece ya, en esta publicación, no sólo como el gran defensor de la virginidad de María, sino, también como el doctor de la virginidad, que luego confirmaría en sus libros, escritos en Belén, el año 392, contra el monje Joviniano que discutía el valor de la virginidad y de la ascética cristiana, y propugnaba otros errores teológicos... Para leer la Obra de Jeronimo contra Elvido en donde defiende la Virginidad Perpetua de Maria puedes entrar aqui: Contra Elvido de Jeronimo

San Eusebio de Cesarea: Fue obispo de Cesarea y se le conoce como el padre de la historia de la Iglesia porque sus escritos están entre los primeros relatos de la historia del cristianismo primitivo. Teólogo e historiador, escritor prolífico.  Gran parte de nuestro conocimiento de la historia de la cristiandad de los primeros siglos proviene de sus Historia de la Iglesia. También escribió sobre el Evangelio y sobre la vida de Constantino y otros. Murió en el 308. Martirizado con Adrian en Cesarea, Palestina, cuando visitaban a cristianos en esa ciudad... Para leer la Historia de la Iglesia por Eusebio entra aqui Historia Eclesiastica


Fuentes:

Wikipedia, la enciclopedia libre
Corazones.org
Patristica.info
Catholic.net
Mercaba.org